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miércoles, febrero 01, 2006

La disertación de los matojos

Ese matojo tan conocido por todos; por algunos más que por otros. Ese matojo que aparece para que no nos quedemos tan solos en esos silencios incómodos, o en esas situaciones tan solitarias, o para que no se note esa ausencia a la que se refiere.
Una calle solitaria y desertica, en una ciudad (extrañamente es la única calle de la ciudad, y eso es una cuidad??) en mitad de algún punto del oeste norteamericano. Esa imagen por debajo de dos piernas que enmarcan la imagen de otro personaje en la lejanía; repetida en otra imagen opuesta...
"Esta ciudad es demasiado pequeña para los dos (joder que si es pequeña, y con todas las cámaras, técnicos, director, gente de maquillaje, dobles, etc..., como no va a sobrar alguien??!!), estás muy gordo". Y ahi, ese es el momento de nuestro amgio el matojo, el momento de fama, el puntual encuentro con la cámara, el lanzamiento al estrellato; precedido de ese viento del desierto que casualmente se ha esperado a que terminara la "larga" conversación de los dos caballeros que están en que no caben en la ciudad. Y aparece, rodando con calma por mitad de la calle, ahora parándose, ahora continuando, ajeno a los enfrentados que hacen como que no lo ven (ese es el silencio más incomodo que puede haber, que se van a matar!!!). Pero es el matojo el auténtico protagonista de la escena, está en el centro, es el centro de todas las miradas (aunque los dos contendientes siguen disimulando); en el mismo instante que el que ha dicho la frase se dice: "quien coño se ha inventado esta mierda de frase, que ridículo" (mientras le cae esa gota de sudor por la nuca, a lo "pegarse un bac" a lo anime japonés). Y acaba saliendo del encuadre de la cámara, felizmente consciente de haber sido determinante en la escena, de que faltaría algo muy importante sin él, de que es imprescindible e insustituible... ni silviditos, ni graznidos de buitre carroñero, na de eso, solo puede ser él, EL MATOJO.
Y ahi ya se ha quedado con nosotros, para marcar esos silencios incómdos, para dejar en evidencia alguna situación o algún vacio. Si, eso que se os ha estado acercando mientras leiais y cada vez lo entendíais menos, y que porfín está pasando en vuestras cabezas al terminar de leer........... (matojo rodando).........